El nuevo escenario de tipos obligará al seguro de vida a reinventar el ahorro

El sector asegurador

Tras más de una década de tipos de interés rondando el cero, el Banco Central Europeo (BCE) tiene previsto eliminar las compras de deuda e iniciar la subida de los tipos para tratar de hacer frente a la espiral inflacionista.

antonio barriendos

Incertidumbre, inflación, volatilidad…, el escenario económico que se abre ante nosotros en los próximos meses va a ser complicado. Para hacer frente a esta coyuntura, el Banco Central Europeo ya ha anunciado su intención de poner el punto final a la compra de deuda pública europea -de la que España se ha beneficiado en los últimos años- y a iniciar de forma progresiva la subida de los tipos de interés. Estas medidas no contentan a todos por igual, pero el BCE estima que son necesarias para tratar de paliar los efectos de la espiral inflacionista iniciada a finales del pasado ejercicio y acelerada por la invasión rusa de Ucrania a finales del pasado mes de febrero.

En los últimos años, casi una década ya, los tipos de interés extremadamente bajos han afectado de lleno al negocio de ahorro del seguro de vida. En un mercado, como el español, acostumbrado a apostar por productos de ahorro garantizados, el contexto de tipos bajo cero supuso un golpe de timón a las estrategias de las compañías de seguros que comercializan vida ahorro hacia otro tipo de productos, vinculados a activos y centrados en que el tomador del seguro -quien contrata- asuma la mayor parte del riesgo, como es el caso de los unit linked, que son seguros de ahorro ligados a activos.

Cambio de las reglas del juego

En este punto, el sector asegurador se enfrenta de nuevo a un cambio de las reglas del juego financiero, que le obligará a cambiar, de nuevo, su estrategia para redefinir la oferta de productos de ahorro. Todo esto, junto con el aumento de la siniestralidad en algunos ramos no vida y el nacimiento de nuevas soluciones aseguradoras mucho más ágiles que las tradicionales, está estrechando los márgenes y, por consiguiente, exigiendo una alta cualificación y eficiencia en el ejercicio de la actividad aseguradora.

Ante esta situación, es hora de rediseñar un nuevo modelo de negocio buscando atender adecuadamente las demandas de una sociedad más digitalizada e informada, ante un nuevo entorno volátil, a través de cuatro pilares fundamentales: gestión eficiente, innovación, digitalización y educación/formación continuada.

Generar más con menos. Y ello se consigue con una gestión eficiente con empleados comprometidos. De nada sirven los grandes discursos corporativos si los empleados no beben de ellos y predican con ellos.

Productos más innovadores

La consultora coincide con muchas voces del sector, que abogan por innovar en productos más acordes a las necesidades de la sociedad actual, que adolece de falta de empleo seguro y en consecuencia de ingresos seguros a largo plazo. Es prioritario formular productos que se adecuen a la economía de muchas familias, su ritmo y variabilidad de vida actual. Hay actividades puntuales que podrían pasar a convertirse en el objetivo de algunas ofertas interesantes según la capacidad de pago, de los periodos de actividad o de nuevas modalidades de seguros adaptadas a las prioridades y preferencias de interacción con los jóvenes.

Como ocurre en todos los campos, los grandes retos dan lugar a logros a veces impensados. El sector está en un momento único para que las compañías definan su estrategia y aprovechen las tecnologías disponibles para reinventar su modelo de negocio a largo plazo y para que los reguladores sean también capaces de responder con agilidad y simplicidad a las demandas de sus ciudadanos.

Evolución plana

Mientras llega este cambio de ciclo, el seguro de vida cerró el primer trimestre del ejercicio con 194.644 millones de euros de ahorro de sus clientes, gestionado a través de todo tipo de seguros de vida. Este importe es muy parecido al anotado el año pasado por esas mismas fechas. A esta cantidad hay que sumar otros 58.298 millones correspondientes al patrimonio de los planes de pensiones cuya gestión está encomendada a aseguradoras. Estos aumentaron un 17,26% en términos interanuales. En total, el sector asegurador velaba por 252.942 millones de euros de sus clientes al acabar los primeros tres meses del año, un 3,42% más que un año antes.

El negocio de ahorro del seguro ha disminuido un leve 0,21% desde el arranque de 2022, hasta los 187.360 millones. El sector logra mantener los recursos de clientes a su cargo a pesar de que durante el primer trimestre del año los tipos de interés se mantuvieron bajos, alega Unespa, la patronal del sector asegurador español.

Los seguros unit linked, aquellos en los que el tomador asume el riesgo de la inversión, son los únicos que crecen en términos interanuales. Aumentan el patrimonio bajo gestión un 18,78%, hasta los 20.211 millones de euros. Las demás líneas de producto anotan descensos en el volumen de ahorro gestionado de distinta intensidad.